Hay muchas maneras de describir las diferencias entre la época que vivimos en la actualidad, y aquella en los que los de mi generación crecieron, se formaron.
No voy a caer en la absurda trampa de comparar y establecer jerarquías. Nada de lamentar lo que se ha perdido, porque ahora mismo tenemos un montón de cosas superiores que no sabemos aprovechar. Pero diferencias notables sí que las hay, y a veces, lo que tuvimos supera con creces lo de ahora.
Por ejemplo, mi generación tuvo la suerte de tener a mano un gran número de críticos de cine que cada semana nos invitaban a “pensar”, tomando como coartada una película.
Uno de los que siempre recordaré con gratitud es José Antonio González, creador del programa televisivo “Historia del cine”, el cual fue creado el 20 de agosto de 1973.
Para mí aquellas personas sí que eran verdaderos “influencers”, o agentes de opinión que ponían sus extraordinarios conocimientos en función de transformar, no a la sociedad en abstracto, sino al espectador como individuo. Para ellos la crítica de cine no era el ejercicio estéril de la pose que busca simpatías a través de la fotogenia (o los likes, se diría hoy), sino algo más serio, y por supuesto, comprometido a largo plazo. José Antonio González lo resumía muy bien de este modo: “Siempre he creído que la crítica no puede ser un estado de ánimo o una reacción emocional, es y tiene que ser un método de trabajo y un principio para la vida”.
Lo cierto es que cuando escucho el tema musical “King Arthur”, interpretado por Rick Wakeman, esté donde esté, viene a la mente “Historia del Cine” con José Antonio González y Carlos Galiano sentados en el mismo set, y es como ir al encuentro de una época que no es pasado, sino presente.
Comparto la página de José Antonio González en la ENDAC. Estoy seguro que se puede enriquecer mucho más. Pero sirva como una suerte de levadura que nos ayudará a recuperar el ejercicio de la crítica como lo soñaba él: como un método de trabajo y un principio para la vida.
JAGB
